martes, 8 de diciembre de 2009

¿Caminar por la acera? En Avilés no sabemos lo que es eso


Hasta hace unos pocos años, Avilés estaba gobernada por el PP. Este gobierno de derechas, tenía una serie de limitaciones que mayormente iban destinadas a la privatización. Después, llegó el PSOE, el presumible partido de "izquierdas", con el cuál, podíamos soñar con más libertades.

En el 2007, se produjo una alteración en el gobierno de la villa. Siguió en el poder el PSOE, pero salió elegida la alcaldesa Pilar Varela Díaz. Ésta, se convertía en la primera alcaldesa de la historia de la ciudad. Se presagiaban una serie de cambios de mejoría, que harían evolucionar Avilés en una ciudad más asequible y con mayores facilidades ¡Hasta íbamos a tener un centro cultural de un famosos arquitecto! Pero desde hace poco tiempo hasta nuestros días, se están dando una serie de cambios que hace que todos estos sueños de prosperidad y mejoría que se tenían de Avilés desaparezcan de golpe y plumazo.

Primero fue la privatización del agua, algo que no veo lógico, es decir, ¿por qué vamos a privatizar una necesidad primaria del ser humano?. Después, fue la zona azul, verde y naranja. Con estos nuevos colores en la calzada, que además de darle un toque moderno y colorido a las calles, ahora, uno tiene que pagar para estacionar su coche. Dentro de lo malo, hay más sitio libre, en detrimento de que si tienes que parar un momento a dejar una cosa en casa, tendrás que abonar la cantidad necesaria.

Pero esta nueva ordenanza de Tráfico, en un alarde de superioridad y poderío autárquico, han ido más allá: 170 nuevas causas para ser multado. Si nos ponemos a analizar todas estas nuevas multas, se puede ver como una solución a numerosos problemas que se dan en la ciudad: multas por invadir los peatones la calzada, por circular con vehículos de tracción animal, por aparcar en isletas, por llevar la radio alta... Estas multas son razonables y pueden mejorar la circulación en la ciudad. Sin embargo, entre estas nuevas multas, hay dos que atentan contra la libertad de una persona: "90 euros: por correr, saltar o por circular a pie de cualquier otra forma que moleste." Y "90 euros: por detenerse en las aceras formando grupos obligando al resto de peatones a poner los pies en la calzada.". ¿Ésto nos hará caminar hacia una sociedad más perfecta?. Pues caminar, lo que se dice caminar, no.

Porque ésto, no solo es un retraso, sino que también es una involución social que nos hará caer en el aislamiento. Si vemos a alguien que hace tiempo que no vemos o que, desgraciadamente, se le ha muerto algún familiar, ¿vamos a parar a saludarlo y a preguntarle qué tal le va?. ¿Vamos a pagar 90 euros por quedar como buenas personas y convertirnos en el ser social que dicen que somos los seres humanos?. Claramente no, y encima estando en época de crisis. Simplemente, moveremos la cabeza de arriba abajo, como animales, porque no vaya a ser que por saludar con el brazo molestemos a alguien, haya un policía cerca y nos multe por circular de tal forma que molestamos a otro transeúnte.

¿Que dicen que correr es sano? Más bien, o al menos en Avilés, es caro. ¿90 euros por hacer footing? Prefiero encariñarme con mi curva de la felicidad. Eso sí, también podría dejar mis estudios y meterme a policía de tráfico. Vamos, gracias a la San Silvestre, me saldrían unas navidades de lujo.

Viendo la evolución de las normas avilesinas, dejarán a un lado las normas de circulación y se dedicarán a crear normas de conducta. ¿Os imaginais cámaras en nuestras casas, todos con la misma ropa o teléfonos pinchados? Nuestra sociedad emularía a grandes obras literarias como "1984" o "V de Vendetta". ¿Quién no quiere protagonizar una de estas obras?

En fin, siempre nos quedará emigrar a un lugar más libre. Total, Estados Unidos, está ahí al lado, ¿no?